Tipos de contaminación y los desafíos que generan

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2023 será el décimo año consecutivo en que la temperatura media de la superficie de la Tierra superará un grado en comparación con los niveles preindustriales. Así lo sugiere la Oficina Meteorológica del Reino Unido (Met Office) en un análisis difundido en diciembre de 2022. Para frenar esta constante subida de temperaturas que venimos observando en la última década, es muy importante un esfuerzo coordinado de empresas privadas, públicas y gobiernos para frenar o desacelerar el impacto de los distintos tipos de contaminación que tienen un efecto directo en el cambio climático.

1 Efectos y consecuencias de la contaminación

Podemos hablar de contaminación cuando elementos o sustancias que no deberían estar en un ecosistema ingresan en él y afectan a su equilibrio. Los agentes contaminantes pueden ser físicos, químicos o biológicos y perjudican medios como el agua, el suelo o el aire cuando se presentan en concentraciones muy elevadas.

Existen varios tipos de contaminación, entre los cuales se incluyen:

1.1 Contaminación del aire 

Causada por la emisión de gases y partículas a la atmósfera, como el dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno y azufre, monóxido de carbono, entre otros. Este es uno de los mayores riesgos ambientales que existen para la salud. 

Mediante la disminución de los niveles de contaminación del aire los países pueden reducir la carga de morbilidad derivada de accidentes cerebrovasculares, cardiopatías, cánceres de pulmón y neumopatías crónicas y agudas, entre ellas el asma.

La contaminación del aire, principalmente identificada como una consecuencia de las ciudades, también está vinculada al cambio climático. Tanto el cambio climático como la contaminación del aire se ven empeorados por la combustión de combustibles fósiles, que incrementa las emisiones de CO2. Estos gases son la causa del calentamiento global. 

La OMS calcula que 600.000 niños y niñas murieron en 2016 por infecciones respiratorias agudas provocadas por la contaminación del aire. El informe destaca que «más del 40% de la población mundial está expuesta a altos niveles de contaminación del aire en sus hogares, provenientes principalmente de cocinar con combustibles y tecnologías contaminantes». 

Por ejemplo, en países en desarrollo, las mujeres normalmente dependen de combustibles de biomasa y carbón para cocinar y calentar, por lo que tanto ellas como sus hijos tienen un mayor riesgo de verse afectados por los efectos de los contaminantes en los hogares.

1.2 Contaminación del agua 

Este tipo de contaminación surge por el vertido de sustancias químicas, residuos industriales, aguas residuales y basura en océanos, mares, ríos, etc.

Debido a la contaminación del agua, la cadena alimentaria se ve afectada y, como consecuencia, el ser humano contrae enfermedades como el cólera, fiebre tifoidea o diarreas. Además, el consumo de agua en mal estado está estrechamente relacionado con numerosas enfermedades infecciosas. 

La contaminación del agua es la principal causa de la desaparición de la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos. El mal estado del agua dulce tiene un gran impacto en el hábitat marino, ya que da lugar al envenenamiento de diferentes especies marinas y, por tanto, la desaparición de la diversidad biológica.

1.3 Contaminación del suelo 

Viene causada por la liberación de sustancias tóxicas en el suelo, como pesticidas, herbicidas, productos químicos y residuos industriales. 

La contaminación del suelo afecta a la seguridad alimentaria ya que se reduce el rendimiento y la calidad de los cultivos. Unos alimentos inocuos, nutritivos y de buena calidad solo pueden producirse si nuestros suelos se mantienen sanos. 

Este tipo de contaminación también puede poner en riesgo nuestra salud. Una parte importante de los antibióticos –utilizados ampliamente en la agricultura y en el ámbito de la salud humana– se liberan en el medio ambiente tras ser excretados del organismo al que se les administró. Estos antibióticos pueden filtrarse en los suelos y propagarse en el ambiente, lo que produce bacterias resistentes a los antimicrobianos y disminuye la eficacia de los antibióticos.

Con una población mundial que se estima superará los 9.000 millones en 2050, nuestra seguridad alimentaria actual y futura dependerá de nuestra capacidad para aumentar los rendimientos y la calidad de los alimentos utilizando los suelos que tenemos disponibles en la actualidad. La contaminación nos afecta negativamente a todos, y se ha identificado como una de las principales amenazas para las funciones del suelo en todo el mundo.

2 Algunos desafíos para luchar contra la contaminación.

Existen numerosos ejemplos de contaminación que afectan a países en desarrollo o comunidades vulnerables. A continuación, se pueden encontrar algunos ejemplos:

2.1 Contaminación por exceso de producción de salmones en Chile

Los expertos coinciden en que una sobreproducción de salmones aumenta los riesgos de generar “condiciones anaeróbicas” (donde se acaba el oxígeno) en los fondos marinos, terminando con la vida de un sinnúmero de especies.

Centro de cultivo de salmones. Archivo Foto: WWF Chile – Denisse Mardones.

La pérdida de oxígeno ocurre cuando bajo las balsas jaulas, donde se crían miles de salmones, se acumulan las heces de los peces y parte del alimento que se les entrega y que no alcanzan a devorar.

En las zonas afectadas existen bancos naturales de otras especies, como es el caso de los erizos, que se han visto afectados por la actividad salmonera. Los buzos mariscadores han detectado un fuerte debilitamiento de la fauna y de los paisajes marinos que hoy día se están transformando en desiertos marinos.

Otro de los problemas que genera una mayor densidad de peces es la potencial pérdida de efectividad de los antibióticos ya que las bacterias se vuelven resistentes debido a su uso extendido. Esta es una de las principales preocupaciones de la Organización Mundial de la Salud puesto que “compromete nuestra capacidad para tratar enfermedades infecciosas y pone en peligro muchos avances médicos”.

2.2 Contaminación del río Pilcomayo por colapso de los diques mineros.

El colapso de un dique con residuos mineros en Bolivia contaminó el agua del Pilcomayo a través de sus afluentes, y no es apta para consumo humano. El colapso generó que una masa de lodo con minerales no recuperados y elementos químicos llegara al río de la Rivera, así como a la quebrada de Tarapaya de ese país, que se conecta con el río Pilcomayo. Los sedimentos que contaminaron las aguas por el colapso del dique de colas en Potosí recorrieron 32 kilómetros aguas abajo.

La gobernación de Salta pidió a la población no consumir agua, pescar, consumir peces ni bañarse en Pilcomayo por el derrumbe de un dique minero en Bolivia. Ahora, un análisis de laboratorio en ese país asegura que el agua del río en su territorio no es apta para consumo humano. 

El investigador Gonzalo Mondaca manifestó que se deberían realizar estudios de contaminantes a los que viven cerca del río, ya que esto podría encender la alerta de un peligro que actualmente se repite en el norte del país, donde poblaciones indígenas están contaminadas por el mercurio utilizado en la minería aurífera.

2. 3  Prevenir los derrames de petróleo en ríos y selvas. Proyecto ARIEL.

Cuando se produce un vertido en una zona marina, puede tener un enorme impacto en el ecosistema circundante y el efecto en la fauna local puede ser grave. Los impactos más graves son el envenenamiento de los organismos, causando daños en su piel, sistema digestivo y órganos internos. Esto puede provocar problemas respiratorios, natatorios, trastornos del sistema inmunitario y la muerte.

En el caso de que el derrame sea de petróleo, se puede crear una capa de hidrocarburo muy opaco en la superficie del agua que impide que la luz llegue a las profundidades y que por tanto las plantas debajo de la columna de agua puedan hacer la fotosíntesis y todo el ecosistema muera.

La lancha Tupan y el dron son sometidos a pruebas en la bahía de Guanabara, en Río de Janeiro Michelle Chevrand / Repsol

El proyecto ARIEL (Robot Autónomo para la Identificación de Líquidos Emulsionados) tiene como objetivo la detección de hidrocarburos en el mar mediante un sistema multi-dron que cuenta con el uso de cámaras especiales. 

Los investigadores probaron el prototipo en un entorno relevante con un dron totalmente autónomo que aterrizaba en una embarcación autónoma. ARIEL, desarrollado por Repsol Sinopec Brasil, alcanzó un hito en diciembre de 2020, siendo el primer prototipo físico en completar con éxito las primeras pruebas en la Bahía de Guanabara (Brasil). 

Este sistema multi-dron tiene como objetivo detectar derrames marinos y realizar actividades de monitoreo ambiental lo que permite reducir la exposición del operador. 

2.4 Reutilizar o reciclar ropa de vertederos 

Montañas de ropa usada en el desierto de Atacama (Chile). (Reddit/ed8907)

Al este de la localidad chilena de Iquique, se extiende el desierto más seco de nuestro planeta, tanto, que en algunos lugares jamás ha llovido ni existe vida. En cambio, lo que sí hay son toneladas de ropa a punto de incendiarse

En Chile está prohibido arrojar desechos textiles en los vertederos legales pues genera inestabilidad en los suelos. Así, no hay dónde dejar lo que no se comercializa, por lo que los restos de la industria textil acaban en estos gigantescos y contaminantes vertederos ilegales del desierto de Atacama.

La industria de la moda es una de las más contaminantes del mundo, después del petróleo. Además, actualmente gran parte de la ropa está hecha de poliéster, un tipo de resina plástica que se obtiene del petróleo, y que tarda más de 200 años en desintegrarse, mientras que el algodón aproximadamente 30 meses. En el desierto de Atacama, la mayoría de las prendas están hechas, justamente, de poliéster. 

Pero, con el paso del tiempo, estas prendas se empezarán a desgastar liberando microplásticos que se dispersan en la atmósfera, afectando gravemente la fauna de la zona y el mar. Otra de las cosas que preocupa a las autoridades locales son los incendios que anualmente se producen en estos basurales clandestinos.

La solución, sin embargo, no es sencilla. Por el momento, hay dos planes en marcha: un programa de erradicación de los basurales clandestinos y la incorporación de la ropa usada en la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que establece una obligación a las compañías que importan a hacerse cargo de sus residuos.

Sin embargo, aún faltan pasos importantes para que ambos planes se hagan realidad: en el caso del primero, todavía debe ser aprobado por el gobernador regional, y en el caso del segundo, aún debe elaborarse un decreto que establecerá esa obligación.