Innovación en Salud: Retos y Oportunidades

La innovación es uno de los grandes retos a los que se enfrenta el sector sanitario. Al respecto de esta temática, el pasado día 12 de mayo se organizó la II Jornada sobre “La Sanidad del Futuro. Retos y Oportunidades de Emprendimiento” del foro Innova ICAI. A este encuentro sobre innovación en salud asistieron profesionales del ámbito de la medicina, de la ingeniería y CEOs de start-ups de éxito.

Una de las ponencias más interesantes, que resumimos en este artículo, fue llevada a cabo por Javier Colás, presidente de Additum y exvicepresidente de Medtronics Europa, sobre la necesidad de innovación en el sector salud

Javier nos explicaba como en los últimos 25 a 30 años la medicina y la ingeniería están convergiendo cada vez más. La entrada de mucha innovación en los sistemas de salud está logrando cronificar patologías que antes eran mortales. Esta innovación juega un papel muy importante para el futuro del sector. 

Se están impulsando 5 áreas especializadas de la medicina, conocidas como las 5Ps, que mejorarán el cuidado de la salud y no solo el tratamiento clínico. Estas son:

  • La medicina personalizada. Se basa en la genética y ayuda a predecir qué va a ser mejor para tratar una patología que se ha manifestado
  • La medicina preventiva. Se refiere a las recomendaciones necesarias para evitar una patología.
  • La medicina predictiva. Combinando las dos anteriores logra una detección temprana de patologías
  • La medicina de precisión. Basada en tratamientos más precisos para las enfermedades.
  • La medicina poblacional. Permite gestionar mejor los riesgos en general de las poblaciones, como lo que ha ocurrido con la pandemia del Covid-19.

Gracias a este aumento de la innovación en salud se estima que en el año 2030 se estará generando 4 veces más salud de lo que se puede generar ahora. 

El principal problema que deriva de este incremento de la innovación es su elevado coste. En 2030 no se tendrá una capacidad presupuestaria 4 veces mayor a la que tenemos hoy. Por eso, el gran reto que la ingeniería tiene que resolver es conseguir generar ese aumento de salud a un coste que sea no mucho mayor al que tenemos hoy. Debemos ser capaces de optimizar la organización para que los presupuestos no haya que multiplicarlos.

Una de las muchas cosas que puede aportar la ingeniería al sector salud es buscar soluciones que creen valor. Una vez se identifica un problema no resuelto, ya sea clínico, organizativo, o de gestión de información, tenemos que ser capaces de desarrollar aplicaciones tecnológicas que nos puedan ayudar a crear valor.

Y es que crear valor no es generar conocimientos para implementar nuevos tratamientos o mejorar los ya existentes.

“El valor se crea cuando se gestiona el sistema de manera eficiente para que el número de tratamientos o intervenciones a realizar sea el menor posible.” 

Este planteamiento nos lleva a tratar de gestionar los procesos médicos en toda su amplitud, no sólo cuando nos llega el caso crítico. Es por esto que la tecnología sanitaria no debe ser solo una aplicación de la ingeniería a la ciencia para lograr tratamientos efectivos. También tiene que ver con la activación del paciente y con la organización eficiente del sistema sanitario.  

Innovación mediante creación de valor en procesos clínicos

“Si queremos crear valor en muchos de los procesos clínicos hay que centrar la atención más allá de la parte crítica del proceso”

Algunos ejemplos en diferentes patologías: 

  • En el caso del ictus detectar a tiempo el problema es igual o más importante que la solución de la ciencia, extraer el trombo. Menos del 50% de los pacientes que sufren un ictus llegan al hospital, y solo se llega a actuar en un 35% de ellos. Existe una ventana de tiempo que es cuando el tratamiento es más eficaz, si esa ventana se nos pasa el tratamiento será mucho menos eficaz y aumenta el riesgo para el paciente. 
  • Con el pie diabético, la mejor terapia que desde la ingeniería podemos hacer es ayudar a prevenirlo para que no suceda el problema y evitar la amputación.  España es uno de los países que más amputaciones de pie realiza, siendo el coste social de un pie amputado 40-50.000 €. Hay que trabajar para intentar que el paciente no se convierta en tipo 2, y cuidar el pie antes para reducir las amputaciones.
  • En el caso del cáncer de mama, se ha mejorado mucho tanto en tratamientos como en sistemas para la detección. Un ejemplo son los screening, sin embargo un 30%  de las pacientes no siguen el screening. Se necesita que las pacientes atiendan a los cribados para detectar a tiempo el problema y no dejar agravar el problema.
  • Para la diálisis es importante, además de la educación en prevención, la monitorización de los pacientes para conseguir su adhesión al tratamiento y que la entrada en diálisis se retrase unos cuantos años. Una diálisis cuesta unos 46000 € al año. En un  hospital con 500 pacientes de diálisis, retrasar la diálisis 2 años supondría ahorrar 46 millones de € al sistema.

En palabras de Javier Colás, ”en cualquiera de las patologías que elijamos hay distintos retos y oportunidades. Algunos relacionados con la ciencia, muchos relacionados con la activación del paciente, y muchos otros relacionados con la eficiencia de los procesos en los cuales esta ingeniería se utiliza”. 

Toda la innovación alrededor de la medicina predictiva y preventiva, personalizada, de precisión y poblacional no se podrá implementar si no somos capaces de optimizar la organización para que los presupuestos no haya que multiplicarlos por 4. Es por eso que conseguir una mejor eficiencia es clave. No tanto para conseguir resolver problemas clínicos, pero sí para poder pagar por esas innovaciones que aparecen.

Innovación para la sostenibilidad en el sector salud

Una gran oportunidad para emprender en el sector salud es la economía circular. Actualmente el sector es responsable del 4.7% de las emisiones de CO2. La reducción de la huella climática y cumplir el objetivo de 0 emisiones abren un abanico de nuevas oportunidades que desde la ingeniería se pueden aprovechar para emprender. 

Un 70% de las emisiones provienen de la cadena logística, es decir, la producción, transporte, uso y gestión de residuos asociados a los productos farmacéuticos, químicos, equipos e instrumentos médicos y hospitalarios.

Recientemente se ha puesto en marcha un proyecto innovador, en el que participa ennomotive, para la instalación de la primera planta de oxígeno e hidrógeno verde en el hospital Viamed de Murcia. Como se cuenta en esta noticia, la generación in situ de insumos o gases medicinales tiene un impacto positivo en la reducción de la huella de carbono al evitar el transporte de estos gases. Además, se reemplazará el gas natural por el hidrógeno como combustible para la calefacción y el aire acondicionado. Con este proyecto se contribuirá a reducir la huella de carbono del hospital en aproximadamente un 25%, reduciendo solamente en calefacción más de 40 toneladas de CO2 emitidas al año.